En tiempos donde la seguridad de todos toma mayor protagonismo debido al riesgo del contagio por el Covid-19, empresas y organizaciones evalúan constantemente los estudios que brindan información vital e indispensable para comprender el comportamiento del virus, las medidas preventivas que pueden ser llevadas a cabo y los artículos como empaques u otros objetos que entran en contacto con el virus en superficies. Lo más importante es reconocer qué elementos pueden ser usados con la tranquilidad de que no serán un canal de propagación para los trabajadores y la comunidad en general.
Una de las más grandes preocupaciones que surgieron con la coyuntura actual fue ¿cuánto tiempo puede durar el virus en superficies como el papel, el cartón, e incluso la madera o el metal? Un dato que ha estado claro desde un inicio es que el Covid-19 se esparce por medio de partículas emitidas cada vez que tosemos, estornudamos o hablamos a menos de metro y medio de distancia en donde hay contacto directo de secreciones respiratorias.
Un estudio realizado por el diario The New England Journal of Medicine evaluó la estabilidad del virus en artículos de diferentes materiales con el objetivo de comprender el comportamiento y el riesgo al que la población se expone al tener interacción con superficies que puedan tener secreciones de personas contagiadas, entre ellas se observó la duración del Covid-19 en el cartón y el papel al ser materias primas que se usan en la cotidianidad. Las variables estudiadas fueron la cantidad de tiempo que el germen puede habitar allí y ser potencialmente riesgoso. Hay que tener en cuenta que las pequeñas partículas que quedan al estornudar o toser son las que pueden durar más tiempo flotando en el aire y recorren distancias más largas, lo que hace que sea más probable entrar en contacto con ellas en espacios más grandes.
Las probabilidades de contagio aumentan si por ejemplo al tocar un material que tiene algunas gotas del Covid-19 luego la persona pasa sus manos por la boca, nariz u ojos. La resistencia de este agente patógeno es uno de los factores que han complicado su erradicación: en el metal dura 5 días; en la madera puede perdurar por 4; en el caso del plástico vive alrededor de 2 a 3 mientras que en el aluminio se mantiene de 2 a 8 horas.
Sin embargo, la interacción con estos residuos del virus tienen menor riesgo que si se trata de un contagio de persona a persona. Por lo tanto, extremar las medidas del uso de tapabocas, lavado constante de manos y el distanciamiento social siguen siendo, un año después de la pandemia, las precauciones más eficaces mientras se obtiene la inmunidad de rebaño.
Por consiguiente, en esta nota vamos a aclarar algunos aspectos sobre lo que puede representar un peligro real y evitar preocupaciones mayores frente a algunos escenarios.
En el estudio citado anteriormente se pudo comprobar que el Covid-19 puede sobrevivir en materiales como el plástico y el acero inoxidable; no obstante, pierde su carga viral hasta después de 72 horas de haberse instalado. Por el contrario, en el cartón no se detecta virus viable pasadas las 24 horas. La investigación recoge que la potencia de contagio cae de forma exponencial con el paso del tiempo. Otro análisis elaborado por el Instituto Indio de Tecnología de Bombay descubrió que el virus tiene dificultades para sobrevivir en superficies porosas ya que las gotícula permanecen menos tiempo en estado líquido.
Sin embargo, aunque existan estos hallazgos las autoridades sanitarias siempre recomiendan potencializar medidas de higiene de manos y que cada vez que deba estornudar o toser tape su boca y nariz con un pañuelo o el brazo.
Cierto es que cuando se tose o estornuda podemos emitir hasta 3.000 gotas que pueden caer en diferentes superficies, pero cada una se comporta de forma distinta y logran mantener al virus vivo en una proporción mayor a la de otros. El estudio citado aseguró por medio de estudios científicos que, dadas las propiedades del papel, el Covid-19 dura 24 horas y en gramaje más delgados como lo usados para la impresión o tisú su permanencia es de 3 horas. Y esto es así porque las fibras tienden a absorber el virus y, teniendo en cuenta que el coronavirus requiere de humedad, en el papel tiende a secarse más rápido y con las condiciones de temperatura determinadas muere más pronto en comparación del aluminio o la madera.
Además, investigaciones de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades han determinado que el nuevo coronavirus tiene menos de 1 entre 10.000 posibilidades de causar una infección a través de superficies. Lo que permite asegurar que las probabilidades de contagio dependen más de las medidas de precaución que del tiempo que el Covid-19 puede permanecer viable.
Es posible afirmar que no hay ningún peligro, incluso en empaques para alimentos que lleguen a barrios o zonas donde haya expansión de virus, dado que en el papel y el cartón la supervivencia es tan solo 24 horas, pero realmente su carga viral empieza a disminuir de forma inmediata reduciendo cualquier posibilidad de contagio.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, infectarse por artículos, como podría ser la manipulación de calendarios corporativos, es realmente baja, así como por paquetes hechos en papel o cartón manipulados y expuestos a diferentes condiciones y temperaturas que hacen que el virus no sobreviva. No obstante, es imprescindible tener en cuenta algunas recomendaciones relacionadas con la higiene: lavado constante de las manos con agua y con jabón y no tocarse la cara en caso tal de estar en contacto con superficies donde transite gente.
A estos consejos hay que sumarle una característica que ha distinguido al virus desde el inicio: cómo se presenta en personas que son asintomáticas, es decir, quienes han estado en contacto con el agente patógeno, resultaron contagiadas pero no tienen ningún indicio que demuestre que efectivamente contrajeron la enfermedad. En este sentido, más que preocuparse por los empaques o las superficies con las que tenga contacto, la atención debe estar enfocada en la prevención junto a su círculo más cercano. Invitelos a usar el mayor tiempo posible el tapabocas, abra las ventanas para que circule el aire e intente y procure mantener los dos metros de distancia, es el espacio seguro que le permitirá estar protegido antes el virus.
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